Manuel Abarzua Koesler
Estimado Visitante: Mi invitacion es a presentarte una explicacion diferente de los hechos historicos mas revelantes de nuestro siglo y como se conectan bajo el alero de poderosas sociedades secretas que manipulan los hilos del mundo. La revolución bolchevique, el financiamiento y surgimiento del nazismo, las verdaderas causas de la Primera y segunda Guerra Mundial, la depresión Económica de 1929, las guerras del petroleo y las armas (como La Guerra del Golfo) y las mayores crisis internacionales mundiales posteriores desde aquel entonces hasta ahora son algunos de los hechos mundiales manipulados por grupos secretos de poder detrás de bambalinas en el mundo de la superpolítica y las finanzas internacionales. Esta es la criptohistoria, la historia detras de la historia, o el verdadero poder detras de las sombras y el manejo de la superpolitica internacional, las crisis economicas y las guerras mundiales. Paso a paso ire publicando diversos capitulos sobre este vasto y apasionante para lo cual reproducire partes del revelador libro "Nadie se Atreve a Llamarlo Conspiracion" del periodista Gary Allen a modo de una especie de curso introductorio al tema (Vease los capitulos en el menu izquierdo). Paralelo a ello, ire publicando diversos articulos que exploran especificos detalles de este apasionante tema.
Amigo lector: Por favor no tengas ninguna duda en contactarte conmigo via email o a traves de esta pagina web.
Sinceramente,
Manel Abarzua Kosler
Mabarz@yahoo.com
ACTUALIZADO el Sábado 14 de Febrero de 2008
La fascinante biografía de Lord Cochrane
Estimado Visitante: Te invito a ver mi análisis de la vida de Thomas Cochrane escrita por el periodista y escritor chileno Renato Bunster (1912-1976) haciendo click aquí.
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¿Quién era realmente Salvador allende?
Estimado Visitante: Te iinvito a ver mi análisis de la psicobiografía de Salvador Allende, de la periodista chilena Diana Veneros haciendo click aquí.
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Saddam Hussein: Una Marioneta Sacrificada
Los medios de comunicación han sido instrumentales en promover la imagen de una superpotencia mundial que logra devolver la autonomía a un país y que le permite enjuiciar y condenar a uno de sus más grandes dictadores: Saddam Hussein. Su sorpresiva y humillante ejecución pública por ahorcamiento, y su transmisión por Internet se revelan como una forma patética de demostrar al mundo que si se ha hecho justicia a las miles de victimas del ex régimen iraquí.
Sin embargo, si consideramos el número de muertes bajo la dictadura de Hussein y lo comparamos con las cifras de soldados y civiles muertos iraquíes y norteamericanos, durante la administración de George Bush padre e hijo; si consideramos hacia atrás todos los muertos de todas las guerras que ha causado, manipulado y participado directa o indirectamente el gobierno norteamericano en todo el mundo, pasando por la guerra de Vietnam, y todas las anteriores desde que los EE.UU. revertiera su política de no intervención a comienzos de la primera guerra mundial, comenzaríamos a tener una idea de quienes han sido los verdaderos asesinos en masa del siglo XX. Aún más, ninguno de los asesinos ha sido jamás llevado a juicio, procesado ni menos sentenciado.
Hussein mismo fue usado como una marioneta del gobierno norteamericano. Con todo su poder militar y político, jamás se habría atrevido a invadir Irak de no ser porque sus amos le dijeron que no se opondrían y que por lo tanto tenía carta blanca. Ello sin contar los grandes beneficios económicos que les reportó a los conspiradores los efectos de la guerra del Golfo, tanto en la venta y el desarrollo de nuevas armas de destrucción masiva como en la temporal eliminación de su competidor petrolero y la consecuente alza del petróleo, reportándole billonarias ganancias. Ello no habría sido posible sin la ayuda invaluable de una marioneta que les sirviera de enemigo para crear un conflicto artificial de proporciones. Claro que cuando Hussein cayó en la trampa e invadió Irak, sus amos no recompensaron su confianza. Por el contrario; fue el principio del fin de Hussein. No lo capturaron ni lo enjuiciaron al derrotarlo en la Guerra del Golfo Pérsico porque simplemente les era inconveniente para sus propósitos en ese minuto. Pronto se acercaría el atentado de las Torres Gemelas y comenzaría la era de otro enemigo y ex títere: Osama Bin Laden. Los manipuladores de los medios de comunicación hicieron muy bien su trabajo al crear la sensación de un inmisericorde líder terrorista imposible de ser atrapado y cuya amenaza podía extenderse a cualquier parte del planeta. Su persecución infructuosa, sumada a la de Hussein, no hizo más que potenciar la sensación general de in defección frente a una nueva forma de terrorismo.
El juicio, sentencia y ejecución de Hussein no tuvo el más mínimo grado de objetividad e imparcialidad. En cambio, se caracterizó por desinformación y apresuramiento en el momento de la sentencia y ejecución humillantes, cuya filmación y transmisión por Internet no hizo más que polarizar las animosidades en la región y avivar la polémica. No puede compararse en absoluto a ninguno de los juicios de Nuremberg. ¿Es así como le pagaron sus amos a Hussein? Probablemente para ellos no fue más que una marioneta sacrificada cuando ya no lo necesitaban. Es un ejemplo del perfecto lavado de imagen de una superpotencia que ha cometido los mayores crímenes contra la humanidad pero cuyos artífices se sientan en sus puestos complacientes al ver que un chivo expiatorio más ha sido sacrificado para pagar por sus pecados. Su red de poder es tan vasta y poderosa que sienten que jamás serán llevados a juicio. Pero sin duda son ellos quienes deberían haber acompañado a Hussein al patíbulo de los condenados, los verdaderos conspiradores y los más grandes asesinos en masa de la historia.
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SADDAM HUSSEIN: A SACRIFICED PUPPET
The role of the mass media has been instrumental in promoting the image of a world superpower successful in giving back autonomy to a country and allow it to send to trial and sentence one of its worst dictator ever: Saddam Hussein. His surprising and humiliating public execution by hanging and its broadcast over the Internet reveal a pathetic way of showing to the world that justice had been done to the thousand of victims of the Iraqi regime.
However, if we consider the number of deaths during Hussein’s dictatorship and compare it to the figures of Iraqi and American military and civilian casualties during George Bush father and senior’s administrations; if we look back and consider all the deaths along all the wars worldwide caused, manipulated by and participated in some way or another by the American government, including the Vietnam War and all the previous ones since the US reversed its politics of non involvement at the beginning of World War I , then we could just get an idea of who have been the real true mass murderers of the twentieth century.
Hussein himself was used as a puppet of the American government. Having all his military and political power, Hussein would have never dared invade Irak unless his masters told him they would not oppose at all, which meant cart blanche for Hussein’s plans. All this, letting alone, the great economic wealth they amassed thanks to the Gulf War, as a product of both the arms development and dealing and as the temporary elimination for their biggest oil market competitors and the rise of oil prices that followed, reporting them billions of dollars. Without the invaluable help of a puppet to play as an enemy for them to spark a an artificial conflict of proportions, this huge business would not have been made. Certainly, when Hussein fell for the trap and invaded Irak, his masters din´t reward his trust. On the contrary, it was the beginning of the end for Hussein. He wasn't arrested nor on trial after being defeated in the Gulf War just because it wasn't fit for their plans in that minute. Soon the Twin Towers attack would follow and the time for a new former puppet would inaugurate: Osama Bin Laden. The mass media landscape painters did a great job by creating the impression of this new kind of merciless terrorist impossible to be caught and whose threat could spread anywhere in our planet. His frustrating persecution, along with that of Hussein, just served to empower the sensation of helplessness before a new form of terrorism.
Hussein’s trial, sentence and execution didn't have the least degree of objectivity and impartiality. Instead, the whole judiciary process suffered from an unexplained secrecy, disinformation and a rush to pass from the trial to a humiliating execution, whose broadcast over the Internet just polarized animosities in the region and sparked a heated debate. The whole process cannot be compared to the Nuremberg trials in the least. Is this the way his masters paid him back? Probably, Hussein was for them just a puppet sacrificed when no longer needed. It is an example of the perfect image washing of a superpower that has committed the worst and biggest war crimes against humanity but whose conspirators smile with complacency in their seats watching another scapegoat being sacrificed to atone for their sins. Their network of power is so vast and deeply rooted that they feel they will never have to stand trial. Undoubtedly, it is them who should have joined Hussein in his way to the scaffold, they being the true conspirators and the biggest mass murderers in history.
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Manel Abarzua Kosler
